El camino hacia el éxito está pavimentado con... ¿accesibilidad? Así es. El tema de la accesibilidad digital es de gran importancia, sobre todo porque nuestra vida cotidiana transcurre cada vez más en línea.
En el futuro, será absolutamente esencial ser accesible digitalmente, y no solo porque se acerque la fecha límite de la Ley de Accesibilidad sin Barreras (BFSG) en junio de 2025. Un sitio web que funcione bien es sobre todo lo siguiente: Claramente organizado, fácil de navegar, bien estructurado y, no menos importante debido a los puntos mencionados anteriormente: Accesible. Si quiere que su sitio web siga funcionando bien en el futuro, diséñelo para que sea lo más inclusivo posible.
Pero, ¿qué significa exactamente ser accesible digitalmente y para quién? ¿Quizá haya incluso numerosas ventajas que puedan derivarse de ello? Descubra más en el artículo de hoy:
La accesibilidad en general puede definirse del siguiente modo: Los edificios y otras instalaciones, los medios de transporte (...) están libres de barreras si las personas con discapacidad pueden encontrarlos, acceder a ellos y utilizarlos de la forma generalmente habitual, sin especiales dificultades y, en principio, sin ayuda exterior. accesibles y utilizables.
Existen distintas normativas para empresas privadas y organismos públicos en materia de accesibilidad digital. Los organismos públicos deben cumplir los criterios de la Ordenanza sobre Tecnologías de la Información Libres de Barreras (BITV) cumplir los requisitos del Estado federado correspondiente cumplir. A las empresas, en cambio, se les aplican los requisitos técnicos de la norma DIN EN 301 549..
La norma DIN EN 301 549 especifica los requisitos que deben cumplir los productos y servicios del ámbito de las tecnologías de la información y la comunicación para ser considerados accesibles. Esta norma es crucial para garantizar que los contenidos digitales sean accesibles para todas las personas.
El noveno capítulo, que trata de los requisitos para los sitios web, es especialmente interesante. Los requisitos técnicos se refieren a las Pautas de Accesibilidad al Contenido en la Web (WCAG), reconocidas como norma mundial y que también sirven de base jurídica en Estados Unidos. Estas pautas se dividen en diferentes grados de compatibilidad. Estos son A (bajo cumplimiento de los requisitos), AA y AAA (alto cumplimiento de los requisitos).
La norma DIN EN 301 549 puede descargarse gratuitamente del sitio web del Observatorio Federal de Accesibilidad de las Tecnologías de la Información:
Es importante destacar que la accesibilidad digital no es sólo una obligación legal, ni tampoco únicamente una responsabilidad moral y ética. Puede ofrecer numerosas ventajas a las empresas que tienen que aplicar la BFSG (Barrierefreiheitsstärkungsgesetz).
Alrededor de 1.300 millones de personas en todo el mundo tienen alguna discapacidad que les impide utilizar correctamente los sitios web. Es decir, ¡casi el 20%! Un estudio de Aktion Mensch muestra también que alrededor del 80% de los sitios web no son accesibles. Dejar este potencial sin explotar sería, por tanto, bastante ilógico desde el punto de vista empresarial.
He aquí algunos puntos sobre cómo la implantación de la accesibilidad digital puede tener un impacto positivo en las empresas:
- Se amplía la base de clientes
- La accesibilidad digital tiene un efecto positivo en la SEO (optimización para motores de búsqueda)
- La imagen mejora gracias al compromiso social
- Los empleados pueden desarrollar todo su potencial
El estudio "El tejido de la pertenencia: Cómo tejer una cultura inclusiva" de Bain & Company muestra incluso que un entorno no inclusivo puede convertirse en un riesgo para una empresa.
De los 10.000 empleados encuestados (procedentes de Australia, Alemania, Francia, Reino Unido, Italia, Canadá y Estados Unidos), sólo alrededor del 30% afirma sentirse plenamente incluido y respetado, independientemente de que pertenezca o no a una minoría. Según el estudio, es más probable que el 70% restante busque otro trabajo: Este grupo de personas tiene seis veces más probabilidades de dimitir.
Siguiendo y superando estas directrices, las empresas y los organismos públicos pueden contribuir positivamente a crear una sociedad digital inclusiva. Para acercarnos a este objetivo, todos debemos trabajar juntos y poner de nuestra parte. Porque solo juntos podremos crear un futuro en el que nadie quede excluido y todas las personas puedan desarrollar su potencial.
